Hace poco tuve una breve discusión en Twitter sobre si el principio Visionario de “No todo vale” era compatible o no con el pasado guerrillero de una persona como Gustavo Petro.
Antes de dejarme enredar yo solito en otra discusión sobre legitimidad de la fuerza pública o la lucha guerrillera sostenÃa y sostengo que no hay divergencia en el criterio siempre y cuando la discusión sea sobre el presente y no sobre el pasado.
Repito primero que, en mi concepto, la lucha armada en los años 1960 y 1970 obedecen más a la moda de una época que a causas objetivas, y que la continuación de tal lucha en las décadas siguientes no sólo no se justifica por las condiciones del paÃs, sino que no obedecen tampoco a un movimiento global. Con esto quiero decir que en ningún momento considero que alzarse en armas contra el estado colombiano es un medio válido para acceder al poder polÃtico en Colombia. Continue reading